‘Matronas’: el crudo y realista retrato de Léa Fehner sobre las parteras

La directora Léa Fehner nos trae Matronas (Sages-femmes en su título original), un filme que no solo conmueve sino que también provoca reflexión y crítica. La película se adentra en el mundo de Sofía y Louise, dos parteras recién licenciadas que deben enfrentar las duras realidades de un sistema de salud defectuoso y saturado.

A través de una narrativa íntima y una dirección precisa, Fehner logra crear una obra que trasciende el simple drama hospitalario y se convierte en una poderosa declaración sobre la feminidad, la resiliencia y las luchas cotidianas de las mujeres en la primera línea de la atención médica.

Matronas: la realidad del sistema de salud

En Matronas, Fehner no escatima en mostrar las deficiencias y los desafíos del sistema de salud. Las protagonistas, Sofía y Louise, son introducidas como parteras llenas de ilusión y esperanza, pero rápidamente deben adaptarse a un entorno donde la sobrecarga de trabajo y la falta de recursos son la norma. La película destaca por su capacidad para capturar la tensión y la desesperanza que a menudo caracterizan los hospitales públicos, ofreciendo un retrato brutalmente honesto de la realidad a la que se enfrentan las profesionales de la salud.

Fehner utiliza una cámara que sigue de cerca a sus personajes, casi como un testigo silencioso de sus luchas diarias. Esta elección estilística no solo añade una capa de autenticidad a la narrativa, sino que también invita al espectador a sentirse parte del caos y la intensidad de la vida hospitalaria. En lugar de glorificar el trabajo de las parteras, Matronas lo presenta con todas sus imperfecciones y dificultades, subrayando la fortaleza y el coraje de quienes eligen esta profesión.

La maternidad y la feminidad

Uno de los aspectos más notables de Matronas es su particular enfoque sobre la maternidad y la feminidad. En un mundo donde estas experiencias suelen ser idealizadas, Fehner no tiene miedo de mostrar su lado oscuro. Las parteras, que deberían simbolizar el cuidado y la vida, se ven obligadas a luchar contra un sistema que parece estar diseñado para frustrar sus mejores esfuerzos. La película se convierte así en una crítica mordaz a las expectativas y presiones que la sociedad impone sobre las mujeres, especialmente en roles tradicionalmente femeninos como el de la partera.

A través de sus personajes, Fehner plantea preguntas incómodas sobre la equidad y el reconocimiento en el ámbito laboral. ¿Por qué se espera que las mujeres acepten condiciones de trabajo inaceptables simplemente porque su labor es “vocacional”? ¿Por qué la profesión de partera, tan esencial para la sociedad, recibe tan poco apoyo y respeto? Estas preguntas resuenan a lo largo de la película, desafiando al espectador a reconsiderar sus propias ideas sobre el trabajo femenino y el valor que se le asigna.

Matronas: una mirada feminista al empoderamiento y la resistencia

Más allá de su crítica social, Matronas es también una celebración del empoderamiento femenino y la resistencia. Las protagonistas, Sofía y Louise, a pesar de los obstáculos, encuentran formas de apoyarse mutuamente y de luchar por lo que creen. Su camaradería y solidaridad se convierten en un faro de esperanza en medio del caos, mostrando que la verdadera fuerza radica en la capacidad de resistir y persistir.

Fehner utiliza esta dinámica para explorar temas más amplios de justicia y equidad. La película no solo se centra en las luchas individuales de sus protagonistas, sino que también aborda las injusticias sistémicas que perpetúan la desigualdad de género. En este sentido, Matronas es una obra profundamente feminista que llama a la acción y a la reflexión.

El guion, coescrito por Fehner y Catherine Paillé, está lleno de momentos de vulnerabilidad y honestidad que resuenan con el espectador. Los diálogos son directos y a menudo conmovedores, subrayando la humanidad de las protagonistas. La química entre Khadija Kouyaté y Héloïse Janjaud, las maravillosas actrices que interpretan a Sofía y Louise respectivamente, es palpable y añade una profundidad emocional a la narrativa difícil de ignorar.

Matronas: una obra provocadora que merece ser contada

Matronas es mucho más que un simple drama sobre parteras. Es una obra que desafía las convenciones y obliga al espectador a confrontar realidades incómodas sobre la maternidad, la feminidad y el sistema de salud. La dirección de Léa Fehner, combinada con las poderosas interpretaciones de su reparto, crea una experiencia cinematográfica que es tanto conmovedora como provocadora.

En un momento en que las discusiones sobre equidad de género y justicia social son más relevantes que nunca, Matronas ofrece una voz crítica e irónica que no puede ser ignorada. La película es un recordatorio de que las historias de mujeres, con todas sus complejidades y desafíos, merecen ser contadas y escuchadas. Y, quizás lo más importante, es una llamada a la acción para todos aquellos que buscan un mundo más justo y equitativo.

Léa Fehner, la directora de Matronas

Nacida el 15 de octubre de 1981 en Francia, Léa Fehner se crió en el mundo de las grandes giras teatrales. Estudió cine y guion en la escuela nacional de cine de Francia, La fémis. Como estudiante, hizo dos prácticas en el extranjero, una en el Centro Cinematográfico de Bamako y otra en Camboya con el director Rithy Panh.

Su primera película, Uno empieza, otros te siguen, fue seleccionada en numerosos festivales, entre ellos la Mostra de Venecia 2009 y el Festival de Cine Americano de Deauville. Ganó el Premio Louis Delluc a la mejor ópera prima y fue nominada a los Premios César.

Su segundo largometraje, Les Ogres, fue premiado en el Festival de Rotterdam de 2016 con el VPRO Big Screen Award. Desde entonces ha colaborado en los guiones de varias películas, entre ellas Grand Marin, de Dinara Drukarova, seleccionada en el Festival de San Sebastián de 2022.

Matronas es su tercera película.