‘Barry’: la mejor serie del año se puede ver en HBO Max y ha sido la gran ignorada en los Premios Emmy 2022
Se celebraron los Premios Emmy y las producciones ganadoras no han sorprendido a nadie. Bueno, casi, Lee Jung-jae se conviertió en el primer actor de una serie de habla no inglesa en ganar el premio con El juego del calamar.
Por lo demás, Zendaya ha vuelto a recibir su merecido premio a mejor actriz; Julia Garner también se ha llevado por su genial interpretación en Ozark, el valioso premio y los galardones a la mejor serie dramática, cómica y miniserie han recaído en Succession, Ted Lasso y The White Lotus respectivamente.
Que sí, que ambas series son muy buenas… Que está bien… se lo merecen… Pero hay una serie que resaltaba por encima del resto y se habría merecido más de un galardón.
Hay una serie que tenía 14 nominaciones, entre ellas a Mejor Serie de Comedia; Mejor Guion; Mejor dirección; Mejor Actor Principal en una Serie de Comedia o dos veces nominada a Mejor Actor de Reparto en una Serie de comedia, pero solo se ha llevado tres (a mejor diseño sonoro, especialistas y edición de imágenes) y se lo debería haber llevado todo, incluidas algunas nominaciones más como, Mejor Actriz en una serie de Comedia.
Esa serie es: Barry, de HBO.
Barry, la mejor serie del año
Barry es una serie que lleva desde 2018 dando alegrías a sus numerosos fans. Sorprendiendo a todos aquellos que se atrevieron a asomarse a su realidad surrealista, violenta y cargada de humor que no ha dejado de superarse en cada temporada.
Este año pudimos ver la tercera temporada de Barry. Una temporada que consiguió lo imposible, alzarse por encima de las dos anteriores.
Sus guiones son oro. La libertad creativa de la que hace gala nos recuerda a lo mejor de series como Louie o Breaking Bad.
Su reparto es maravilloso. Hacen creíble lo increíble. Su protagonista, Bill Hader, nunca me entusiasmó, pero en esta serie está de quitarse el sombrero. El resto del reparto, destacando a Sarah Goldberg, Henry Winkler, Stephen Root y Anthony Carrigan es espectacular. Ellxs están increíbles, dan vida a personajes que ya son historia de la televisión, pero esos personajes antes se han escrito, y ¡de qué manera! Para quitarse el sombrero.
Barry nos sumerge en un mundo que fascinará a todos aquellos fans de las pelis de Steven Seagal y los que su película de cabecera es Noviembre, de Achero Mañas.
Pero ¿de qué va Barry? Ahora voy con eso.
Cuando un “No” en un cásting duele más que un disparo en la pierna
La serie nos cuenta la historia Barry Berkman, un asesino a sueldo que de forma accidental va a parar a una clase de teatro e irremediablemente queda seducido por el arte dramático. A partir de ese momento, Barry decide dejar su vida de sicario atrás y darlo todo por las tablas de un teatro o los focos del cine y la televisión.
Barry Berkman no es un buen actor, en lo que destaca en el arte de infligir dolor. En el arte de matar. Pero la interpretación le da todo aquello que no tenía y anhelaba. Amigos (con su hipocresía implícita incluida), un mentor/figura paterna (maravilloso Henry Winkler), y un amor (Sarah Goldberg, tela lo que llega a hacer en alguna escena), una actriz que lo hace todo para cumplir su sueño.
Lo malo es que la vida no se lo va a poner nada fácil. Dejar de matar no es tan sencillo. Sobre todo cuando tu socio (el divertido e inmortal Stephen Root) o la policía, las mafias rusas y el cártel mexicano no dejan de ponerse en tu camino.
Barry Berkman hará todo lo que esté en su mano para proteger todo lo que el arte dramático le ha mostrado. Para proteger a su nueva familia. Pero no será fácil, ya que su peor enemigo será él mismo.
Por qué Barry debería haber arrasado en los Premios Emmy 2022
Si después de leer lo original de su premisa y los piropos que le eché a su reparto y guionistas, aún tienes dudas de por qué la serie de HBO debería haber conseguido todos los premios habidos y por haber en los Premios Emmy de este año, no te preocupes, te lo explico.
Barry, consigue que sus episodios de 30 minutos te descarguen de mucho del stress con el que llegas a casa. Te divierte, sorprende, emociona y alucina por partes iguales. Es una de las series más originales de los últimos años. Su lenguaje audiovisual no se conforma con el sota, caballo y rey del resto de producciones mainstream.
Consigue eso tan bonito y difícil que es sentir que sus personajes son tus amigos. Mezcla la realidad con lo fantástico de una manera tan sencilla que tan solo puedes rendirte a ese mundo y creértelo sin ofrecer resistencia.
Pasa del humor más loco al drama más descarnado sin que te hayas dado ni cuenta. Hace que nazcan en ti todo tipo de emociones. Tanto si eres actriz/actor como si no (que, si no lo eres, después de ver la serie te apuntarás a una escuela. Seguro.) te enganchará sin remedio.
Todo el humor que aplica a su salvaje y explícita violencia se lo resta a lo duro que es querer dedicarse a un oficio, el de actor, en el que, en nuestro país, solo trabajan el 8% de esos valientes.
Espero que el año que viene Barry arrase en los Premios Emmy. Porque es una serie única y por ese 92% de actrices y actores que no puede desempeñar el oficio que da sentido a sus vidas.
Saludos furiosos.