Sitges 2021: Ranking de sus peores películas

Como dicen, no todo el monte es orégano, y este año esa clásica expresión le viene como añillo al dedo a lo que hemos visto en la sección oficial del Festival Internacional de Cine Fantástico de Catalunya. Hemos visto (y aún nos quedan unos días de festival) excelentes películas de las que ya os hemos hablado y que también reuniremos en un ranking, pero también nos hemos encontrado con alguna que otra producción que, aun estando abaladas por el prestigio de sus creadores o de otros festivales, nos han decepcionado sobremanera. Por ese motivo decidimos ofreceros en un solo artículo un pequeño ranking con las peores películas del festival en su sección oficial hasta ahora.

Top 5 de las peores películas de Sitges 2021

5. Belle, de Mamoru Hosoda:

Puede que much@s me quieran matar por haber metido la última película del señor Hosoda (Premio Honorífico en Sitges) en esta lista, pero así lo he sentido, qué le vamos a hacer. Os lo explico.

Belle es una nueva versión del cuento de La Bella y la Bestia pero revestida de la “modernidad” de los años 20 de nuestro siglo. Como en toda la obra de Hosoda su animación es sobresaliente, tanto como su imaginería, aunque algunas veces se repita demasiado (muy bonita la ballena voladora pero se repite mucho como recurso estético).

La peli pretende ser un musical, pero creo que solo diferencié tres canciones (aunque algunas se repitieran mucho), algo demasiado pobre para una película de dos horas. Precisamente su duración fue otro de sus problemas. A Hosada le pareció poco el cuento de La Bella y la Bestia y en Belle nos quiso contar algunas otras cosas. Que si una subtrama sobre un niño maltratado. Que si una reflexión sobre las redes sociales, los avatares y sus consecuencias. Los traumas por la perdida de seres queridos, o incluso inculcar el mensaje de ayudar siempre al prójimo aunque te cuesta la vida hacerlo… Todo eso envuelto con toda la inocencia y el azúcar del mundo.

El resultado es un guirlache tan dulce como bonito pero con tres efectos secundarios inevitables: un aburrimiento soporífero, la sensación de que esa historia ya te la han contado mil veces y que el caramelo del guirlache se te atragante al pegarse con fuerza en tu garganta.

4. Veneciafrenia, de Álex de la Iglesia:

De Veneciafrenia, ya os hablamos AQUÍ, así que no me enrollaré mucho. Me disgusta que una película de Álex de la Iglesia esté en una lista de peores películas. Es un director que admiro y del que siempre espero con ganas su último trabajo, pero esta vez y me duele mucho decirlo, no ha estado a la altura.

Un casting protagonista completamente errado, un guion sencillo y simple con diálogos ridículos y conflictos sin resolver, el anticlímax ejecutado torpemente de su final y acciones como los asesinatos de los turistas sin ningún tipo de respuesta o consecuencia, son algunos de los motivos que hacen que sea muy difícil salvar la nota de un producto que simplemente por sus medios y venir de quien viene, no debería caer en ese tipo de errores. Ojalá solo sea un tropezón pasajero.

3. Luzifer, de Peter Brunner

Peter Brunner, nos cuenta la historia de una madre y un hijo con algún tipo de discapacidad mental que viven en la montaña ajenos a la sociedad capitalista y con fuertes creencias religiosas. Como si sufrieran el síndrome de Diógenes, su casa está llena de trastos y desorden. Nunca queda claro a que se dedican realmente.

Varias veces se pregunta en la película dónde está el diablo, y el propio director de la peli nos instaba en su presentación a que nosotros, los espectadores, también lo buscáramos.

Después de ver la película creo que encontré al diablo ¿dónde?, en la figura del mismísimo director. Hacer una película en la que parece que el propio Brunner no saber ni lo que cuenta, llena de imágenes que podrían resultar extrañas, exóticas e incluso interesantes, desaprovechadas con personajes de los que nos cuenta con torpeza su pasado y nos confunde más que otra cosa con su presente, es una cosa, pero pretender que la veamos es un acto definitivamente diabólico.

2. Offseason, de Mickey Keating

Offseason está vacía. No hay nada por lo que tengamos que verla. Keating es un mal director, como ya demostró en Darling, Carnage Park o Psychopaths, serie B de la mala.

En Offseason intentá saltar al cine comercial con una cinta de terror con todos los lugares comunes del género, pero con una historia horrible que no funciona en ningún momento y realizada con muy pocos medios.

El resultado es un film que en algún momento te intenta asustar pero nunca lo consigue. Su diseño sonoro es básico, poco novedoso y amateur. Sus efectos FX más de lo mismo. Los actores y su protagonista son un desastre. Del reparto solo se salva el gran Richard Brake (31), que aquí está completamente desaprovechado.

En definitiva, Offseason es una película a evitar a no ser que quieras descubrir por qué dicen de ella que cuenta una historia Lovecraftiana (menuda osadía decir algo así…)

1. The Medium, de Banjong Pisanthanakun

Llegamos a la joya de la corona de las peores películas de Sitges 2021. No exagero si os digo que The Medium es la cinta que más hype generó desde que se anunció que la programarían en Sitges. El hecho de que en Corea se tuviera que proyectar con las luces encendidas nos hizo pensar que estábamos con la película más terrorífica en años. Eso y que su director era el tailandés de nombre impronunciable Banjong Pisanthanakun (Shutter), con guion del coreano Na Hong-jin (The Yellow Sea, The Wailing).

Si a todo eso le sumamos lo que tardaron en documentarse sobre las posesiones, supercherías y el chamanismo tailandés, no era de extrañar que esperáramos el mejor Thai-horror del siglo. Una película de folk-horror de referencia. Pues nada de eso… más bien nos encontramos todo lo contrario.

The Medium es un falso documental que prometía en su primer cuarto de hora y que se va convirtiendo en el peor found footage de la historia a medida que se adentra más en la ficción. Se descubre como una película con tintes machistas, un casting herrado, muy mal dirigida y con todos los tópicos que tiene desde su origen el subgénero de cine de exorcismos.

The Medium es la única película que ha estado a la altura de The Trip a la hora de generar carcajadas en la sala, con el inconveniente de que, a diferencia de la genial película protagonizada por Noomi Rapace, esta pretendía darnos justo el efecto contrario…

Bonus: Prisioners of the Ghostland

La nueva película de Sion Sono (Love & Peace) consigue dos objetivos: convertirse en la peor película de su director, y aunque parezca imposible, quizá en una de las cinco peores de nuestro querido Nicolas Cage.

Su tráiler y la mente retorcida de su director nos hizo creer que nos encontrábamos con una divertida versión salvaje y loca de la joya de Carpenter, Golpe en la pequeña China, protagonizada por Nicolas Cage. Pues no ha sido así.

La película es un despropósito mayúsculo. Su guion es ridículo, y ni mezclando samurais con pistoleros, trajes con bombas en la huevada, el hijo de Cassavetes y director de El diario de Noa o John Q, interpretando a un ladrón zombi o actores de la factoría de Rob Zombie, se consigue salvar una película aburrida hasta decir basta, predecible y mucho menos loca de lo que parece al leer esta reseña o ver su, por otro lado, genial tráiler y póster.

No os acerquéis a esta película si no queréis perder aún más tiempo de vuestra vida.

Aquí llegamos al final del ranking de las peores películas de Sitges 2021. Espero no tener que actualizarlo con nuevos títulos.

Saludos furiosos.