‘Spaceship Earth’: Gran Hermano en un ecosistema artificial

El próximo 17 de junio llegará a Filmin el documental Spaceship Earth, considerado como el Gran Hermano más ecológico y bizarro. Spaceship Earth va sobre un grupo de visionarios contraculturales que se aislaron durante dos años en un ecosistema artificial. ¿La realidad supera a la ficción? En este caso sí. El documental está lleno de giros de guion y tiene todos los ingredientes de la ficción más loca que puedas imaginar.

No te asustes, todavía no he perdido la cabeza del todo; esto no va de ‘quién me pone la pierna encima para que no levante cabeza, ¡¿quién?!, o de, ‘no os preocupéis, que me voy a casar con ella’; la cosa pinta más sofisticada. En un tiempo pandémico en el que nos da por mirar y cuestionarnos el futuro más de lo normal, Filmin nos vuelve a sorprender con una interesante propuesta documental que viene que ni pintada en esta época. Hablamos de Spaceship Earth, el documental que llegará a Filmin el 17 de junio.

Imagen del documental Spaceship Earth con los ocho integrantes del Biosphere 2. Cedida por NEON.
No, no son los Power Rangers. Imagen del documental Spaceship Earth con los ocho integrantes del Biosphere 2. Cedida por NEON.

Spaceship Earth, un extraño experimento que salió rana

Filmin estrena Spaceship Earth, el documental sobre uno de los experimentos más extraños de la historia de la ciencia: el colosal Biosphere 2. Tal y como nos cuentan desde la plataforma, en 1991, ocho visionarios imaginaron un mundo paralelo al actual con la intención de aprender a sobrevivir en otro planeta, llegado el caso. Se aislaron en un ecosistema artificial y autosostenible con plantas, animales, etc. y allí se quedaron durante dos intensos años en los que, además, salió a relucir lo peor del ser humano.

Esta especie de ‘mundo paralelo’ era una réplica del planeta Tierra, de ahí el nombre de Biosphere 2; eso sí, sin acceso a agua, comida u oxígeno del exterior. Se les acusaba de calamidades ecológicas y de pertenecer a un grupo de culto, pero si lograban sobrevivir, demostrarían que la vida a largo plazo en la Luna o en Marte era posible. El mundo entero les observaba atónito…

Imagen del documental Spaceship Earth. Los habitantes del Biosphere 2 en el edificio en Oracle, Arizona. Imagen cedida por NEON.
Imagen del documental Spaceship Earth. Los habitantes del Biosphere 2 en el edificio en Oracle, Arizona. Imagen cedida por NEON.

Biosphere 2, el Gran Hermano ecológico

Biosphere 2 era un complejo de tres hectáreas situado en Arizona (Estados Unidos) donde los excéntricos participantes cultivaban comida, hacían vida y se peleaban entre ellos: un Gran Hermano ecológico en toda regla. ¿Crees que podía salir algo mal? Pues bien, todo salió mal, un completo y absoluto desastre.

Pronto se empezaron a quebrar las estructuras del biodomo, el oxígeno menguaba, en consecuencia, animales y plantas morían poco a poco. “El aislamiento de estos ocho visionarios duró dos años, que malnutridos y derrotados luchaban por sobrevivir a base de plátanos y frijoles”, cuentan desde Filmin.

“Cuando vi por primera vez una fotografía de los integrantes de Biosphere 2, pensé que era una película de ciencia ficción”, comenta el director Matt Wolf, quién usa material de archivo y entrevistas inéditas con los participantes del proyecto. Lo grabaron todo, desde sus primeros días hasta el mediático final. “Teníamos 600 horas de vídeo. Es increíble tener todo ese material que te revela cada una de las partes de la historia, repleta de giros inesperados”.

Una historia tan real que puede resultar inverosímil

¿Pero qué hace que un experimento sea un éxito o un fracaso? Evidentemente, en el imaginario colectivo quedó como el gran chasco de los años noventa, ridiculizado y parodiado por los medios de comunicación. Sin embargo, en el documental Spaceship Earth, Matt Wolf le da una vuelta de tuerca al asunto y se centra en la valentía de estas ocho personas apartadas de la vida y decididas a combatir el cambio climático.

Spaceship Earth tuvo su premiere en la Sección Oficial de Sundance, concursó en el Festival de Sitges y fue la película de clausura en Americana Film Fest.