WomanInFan en el Festival de Sitges: más mujeres en el cine fantástico
La nueva edición del Festival de Sitges está a la vuelta de la esquina. En un año en el que la presencia femenina está ganando enteros en el cine fantástico y de terror, el festival por antonomasia del género da un paso hacia adelante y crea WomanInFan. El objetivo es mejorar la presencia de la mujer creadora en el cine fantástico internacional.
WomanInFan: mejorar la presencia de la mujer creadora
Las escuelas de cine están llenas de mujeres estudiantes del séptimo arte. Sin embargo, la realidad de la escuelas no es un posterior reflejo en la industria cinematográfica. Aunque se está avanzando y parece que las iniciativas en favor de la visibilidad del talento femenino están surtiendo efecto, es aún necesario un impulso mayor.
Si ponemos el foco en el género fantástico y de terror podemos asegurar, sin temor a equivocarnos, que la presencia de creadoras es cada vez más notoria y brillante. Sin embargo, las estadísticas siguen situándolas en una clara desventaja frente a sus compañeros. A modo de ejemplo, en la sección oficial a competición del Festival de Sitges en los últimos diez años sólo un 6 % de los largometrajes han sido dirigidos por mujeres (cifra que sube hasta el 10 % en co-dirección).
Con estos datos en mente, desde el festival de referencia del fantástico se han arremangado las mangas de la camisa y se han puesto manos a la obra para tratar de paliar esta situación y sentar las bases para que en los próximos años los techos de cristal se rompan para dejar emerger el talento femenino. De esta forma, WomanInFan nace desde la organización del Festival de Sitges con la voluntad de ayudar a mejorar la presencia de la mujer creadora dentro de la industria del fantástico en tres líneas de trabajo principales que te detallamos a continuación.
WomanInFan en tres líneas de trabajo
En primer lugar, WomanInFan arrojará luz en la memoria histórica de todas aquellas mujeres que han contribuido de una manera u otra a la historia del cine fantástico. En este sentido, se inicia la creación de un fondo documental.
La segunda línea de trabajo de WomanInFan pasa por sensibilizar sobre el talento femenino respecto al fantástico como un lenguaje más. En este sentido, se concederán tres becas, gracias al apoyo de Vertix, para tres cineastas sin bagaje en el fantástico pero con una inicial trayectoria cinematográfica destacada.
La tercera pata será la visibilización de la mujer cineasta en el cine de género para que la industria audiovisual del país confíe este tipo de proyectos a futuras productoras, directoras y guionistas. El Festival de Sitges amplía pues sus funciones para producir un cortometraje anual escrito y dirigido por mujeres dentro de una convocatoria abierta.
La mujer en el fantástico: de mártir a heroína
El último informe anual CIMA 2020 sobre la representatividad de las mujeres en el sector cinematográfico del largometraje español muestra que el 33 % de profesionales contabilizadas son mujeres y el 67 % restante son hombres. Estos porcentajes corresponden a un registro muestral de 2.277 profesionales, de las cuales 780 han sido identificadas como mujeres y 1.597 como hombres.
Sin embargo, aunque los porcentajes siguen distantes, una de las conclusiones finales de CIMA en este informe es que la frecuencia de reconocimiento a las mujeres ha ido en aumento en estos seis años estudiados en la industria cinematográfica.
Si ampliamos el radio de acción a nivel internacional y nos centramos en el género de terror y fantástico, poco explotado hasta el momento por las cineastas patrias, encontramos títulos súper interesantes. Ya en los 60-70 comenzó a dibujarse una nueva mirada sobre la mujer en el cine de terror y fantástico. En este caso en forma de papeles femeninos que situaban a la mujer bajo otro prisma, con más aristas y colores interpretativos. Ejemplo de ello es la inolvidable Mia Farrow o la excelente Ruth Gordon en La semilla del Diablo o Linda Blair en El exorcista. En este momento comenzamos a dejar atrás el arquetípico papel femenino de mártir para comenzar a ganar peso en las tramas y hasta ser las malas-malísimas.
Ellas toman los mandos
En una etapa posterior aún más interesante las vimos a ellas tomar los mandos del guion o la dirección. El Festival de Sitges ha sido el mejor escaparate fílmico para ver estos necesarios avances en aras de la igualdad de género. En este sentido, 2014 fue un año clave con títulos como Good night Mommy, dirigida por el tándem Veronika Franz y Severin Fiala; The Babadook por Jennifer Kent o A girl walks home alone at night, dirigida por Ana Lily Amirpour.
En 2015 seguimos con la senda y pudimos ver en Sitges películas como Raw, de Julia Ducournau; The Love witch, de Anna Biller, The Lure, de la polaca Agnieszka Smoczynska o La invitación de la estadounidense Karyn Kusama. La invitación se alzó con el premio a Mejor Película en la sección oficial. Un camino que, por suerte, no frenó en 2015, ya que en la última edición del festival también hemos podido disfrutar de otras muchas cintas dirigidas (y en muchos casos, protagonizadas) por mujeres. Por ejemplo, nos topamos con sorpresas tan gratas como Relic, de Natalie Erika James; She dies tomorrow, de Amy Seimetz; 12 hour shift, de Brea Grant o, mi favorita, Jumbo, de Zoé Wittock, entre muchas otras.
Ahora, con la iniciativa WomanInFan, esperamos que muchas más cineastas de nuestro país se animen a adentrarse en el género y nos hagan disfrutar con sus particulares miradas. Nos parece una excelente iniciativa para potenciar y reivindicar el talento femenino en la industria del fantástico.
Imagen de portada: Relic, de Natalie Erika James.
Fuente: Festival de Sitges.